lunes, 28 de diciembre de 2009

El efecto bumerán

Según la RAE, una bumerán es un "arma arrojadiza [···] que [···] puede volver al punto de partida" (ver definición completa). A raíz de dicha arma, en castellano (al menos en castellano de España), surgió la expresión "regalo bumerán" que, si bien no vuelve al punto de partida, sí continúa su trayecto de mano en mano hasta el destinatario final.

Afortunadamente no suelo recibir tales presentes o al menos yo no soy consciente de ello. Sin embargo, este año sí tendré uno así. ¿Que por qué hablo en futuro? Porque todavía no lo recibí. ¿Que cómo lo sé? Por una serie de conversaciones. El caso es que cierto colectivo taurino regaló a una prima de mi mujer un escultura de bronce que representa a un todo y un recortador (o eso entendí). Esta chica se la regaló a su padre que, ni corto ni perezoso, pensó a quién podía endilgársela. Y se acordó de mí, si bien no sé por qué.

Mi duda ahora es: ¿Qué hago con la escultura? ¿Dejo que se llene de polvo en un trastero? ¿La pongo en mi casa donde no pegará ni con cola? ¿O dejo que siga su destino buscando quien sepa apreciarla? ¿No sería irónico que, de mano en mano, acabase en poder de uno de los miembros de la asociación taurina que empezó el bucle?

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